Pancho Aquino nos cuenta, que cuando se acerca fin de año los ángeles curiosos se sientan al borde de las nubes a escuchar los pedidos que llegan desde la tierra. ¿Qué hay de nuevo? -pregunta un ángel recién llegado. Lo de siempre: amor, paz, salud, felicidad, contesta el ángel más viejo. Y bueno, todas esas son cosas muy importantes. Lo que pasa es que hace siglos que estoy escuchando los mismos pedidos y aunque el tiempo pasa, los hombres no parecen comprender que esas cosas nunca van a llegar desde el cielo como un regalo. ¿Y qué podríamos hacer para ayudarlos? - Dice el ángel más joven… ¿Te animarías a bajar con un mensaje y decirlo al oído de las personas que quieran escucharte? - pregunta el anciano. El ángel joven acepta y se desliza a la tierra y trabaja duramente mañana, tarde y noche, hasta 1os últimos minutos del 31 de diciembre. Ya casi se 
escuchaban las doce campanadas y el ángel viejo esperaba ansioso la llegada de una plegaria nueva o renovada. Entonces pudo oír la palabra de un hombre que decía: "Un nuevo año comienza. Entonces, en este mismo instante, empecemos a recrear un mundo distinto, un mundo mejor: sin violencia, sin armas, sin fronteras, con honradez, con amor, con dignidad; con menos policías y más maestros, con menos cárceles y más escuelas, con menos ricos y menos pobres. Unamos nuestras manos y formemos una cadena humana de niños, jóvenes y viejos, hasta sentir que un calor va pasando de un cuerpo a otro, el calor del amor, el calor que tanta falta nos hace. Si queremos, podemos conseguirlo, y si no lo hacemos estamos perdidos, porque nadie más que nosotros podrá construir nuestra propia felicidad"…
Hermanos, la llegada de un nuevo año es propicio para reflexionar sobre el pasado, el presente y el porvenir de c/u y el de nuestros pueblos. Si te detienes por un instante y miras hacia atrás, te darás cuenta que estas exactamente donde te trajo tus acciones pasadas. Es que el ser humano construye su futuro día a día mediante sus pensamientos, palabras y acciones, y estas a su vez van moldeando el presente. No pierdas tiempo, es hora de que uses tu voluntad; creativa y constructivamente. PALABRA DE CHAVIÑEJO TE DESEA UN VENTUROSO 2010. Bendiciones.
escuchaban las doce campanadas y el ángel viejo esperaba ansioso la llegada de una plegaria nueva o renovada. Entonces pudo oír la palabra de un hombre que decía: "Un nuevo año comienza. Entonces, en este mismo instante, empecemos a recrear un mundo distinto, un mundo mejor: sin violencia, sin armas, sin fronteras, con honradez, con amor, con dignidad; con menos policías y más maestros, con menos cárceles y más escuelas, con menos ricos y menos pobres. Unamos nuestras manos y formemos una cadena humana de niños, jóvenes y viejos, hasta sentir que un calor va pasando de un cuerpo a otro, el calor del amor, el calor que tanta falta nos hace. Si queremos, podemos conseguirlo, y si no lo hacemos estamos perdidos, porque nadie más que nosotros podrá construir nuestra propia felicidad"…
Hermanos, la llegada de un nuevo año es propicio para reflexionar sobre el pasado, el presente y el porvenir de c/u y el de nuestros pueblos. Si te detienes por un instante y miras hacia atrás, te darás cuenta que estas exactamente donde te trajo tus acciones pasadas. Es que el ser humano construye su futuro día a día mediante sus pensamientos, palabras y acciones, y estas a su vez van moldeando el presente. No pierdas tiempo, es hora de que uses tu voluntad; creativa y constructivamente. PALABRA DE CHAVIÑEJO TE DESEA UN VENTUROSO 2010. Bendiciones.
