ANHELO DE JUSTICIA

La justicia es el arte de hacer lo justo, dar a c/u lo suyo, virtud de cumplir y respetar el derecho ajeno y ejercitar libremente sus derechos. La justicia no es repartir cosas, sino saber decidir a quien le pertenece algo por derecho. Por consiguiente la justicia es ética, equidad, honradez o sentimiento de rectitud que gobierna la conducta para dar a cada uno lo que es suyo. La justicia se transforma y deja de ser tal, cuando en un orden social se busca proteger determinados intereses considerados esenciales por un sector de la sociedad, o cuando aparecen intereses en conflicto, como el que actualmente protagoniza el poder judicial con el Congreso de la república por el caso de espionaje telefónico. En el país el poder judicial simboliza la justicia. Si volteamos la mirada a la década pasada, encontramos un poder judicial que de un palacio de justicia, pasa a instalarse, confortablemente en un edificio de 22 pisos que fue del Ministerio de Educación y en otro local de la avenida Abancay que fue del Ministerio de economía y finanzas. El gobierno de Toledo a los meses de haber asumido el cargo, otorgo aumentos a jueces y fiscales en muchos casos triplicándoles el sueldo. ¿Cual es el resultado de ese esfuerzo hecho con el dinero de todos los peruanos? ¿Ha mejorado la administración de justicia? No. La evidencia entre innumerables casos es que por ejemplo un proceso contencioso administrativo dure 5 á 6 años, contraviniendo su razón de proceso sumario. Si justicia es saber decidir a quien le pertenece cada cosa por derecho. ¿Eso se hace? ¿Acaso no es un derecho intangible de la población económicamente activa, acceder a fuentes de trabajo dignos, que el estado debe generar con el dinero de todos? ¿Por qué no hay trabajo? El trabajo es un deber y un derecho. Es base del bienestar social y un medio de realización de la persona. La falta de trabajo genera y luego incrementa a la delincuencia. ¿El estado actúa coherentemente al plantear la necesidad de construir más cárceles para reprimir a la delincuencia? ¿Y el derecho del pueblo hambreado? Si hubiera trabajo y educación de calidad para el pueblo peruano la carga procesal de los jueces y fiscales y la necesidad de construir más cárceles, se reducirían drásticamente. Pero lamentablemente los encargados de administrar justicia en el país guardan silencio históricamente cuando se distribuye injustamente el dinero recaudado de todos los peruanos, olvidándose del bienestar social y la realización de la persona. ¿Eso es administrar justicia? La autonomía de poderes no significa sálvese quién pueda y como pueda, cada cual sacando mejor provecho para sus propios intereses Hans Kelsen dice: La justicia es para mí aquello, cuya protección puede florecer la ciencia, y junto con la ciencia, la verdad y la sinceridad. Es la justicia de la libertad, la justicia de la paz, la justicia de la democracia, la justicia de la tolerancia.” Todas las virtudes están comprendidas en la justicia. Por eso la importancia de que haya justicia en nuestro medio, ya que de no ser así, viviríamos en un mundo de caos y del cuál, no nos podríamos salvar.

Reflexionemos y recusemos el caos.