Todo hace prever que Ollanta Humala ganará las elecciones presidenciales el próximo 10 de abril y pasará a la segunda vuelta. Lo que no se puede, es adelantar quién será el segundo candidato que competirá con el anterior, por que, según sondeo de encuestadoras al electorado, se vislumbra un cuádruplo empate, por consiguiente, el proceso electoral presidencial del 2011 será el más reñido en la Historia del Perú.
Ha escasos 08 días, es necesario e indispensable que el electorado opte por el voto responsable, pensado, meditado y reflexionado. Los ciudadanos responsables tienen que evitar que el país quede en manos de aventureros o personas deshonestas e incapaces. El voto debe ser analizado y profundamente consciente. El voto no puede representar solamente el interés personal, un buen ciudadano no solo vota por quien a él le convenga, sino por quien mejor pueda dirigir el país. Si vas a votar, por que un candidato te llena la mente de ofrecimientos, es tu paisano, o por que en una anterior ocasión te aumentó el sueldo o hizo alguna obra en tu pueblo, ¿quién asumió los sobrecostos de las ofertas o del aumento o de la ejecución de la obra? ¿De qué bolsillo salió el dinero? ¿Cuánto se quedó en camino? ¿Por qué hoy la corrupción se constituye en el problema más grave y frontal que afronta el Perú junto con la violencia social?
El 10 de abril estamos obligados a optar por una alternativa, que no sea “EL MAL MENOR”. Busquemos información suficiente hasta entender cuál de los candidatos es la mejor opción que necesita el Perú, como para continuar en el camino del desarrollo pero de mano con los más pobres y no como hasta ahora, dándoles las espaldas a ellos.
Todos sabemos que en estas elecciones, algunos candidatos en carrera, ya tuvieron la oportunidad de dirigir el país directa o indirectamente, sin embargo, permitieron que la corrupción y la violencia social crezca aceleradamente y amenace convertir el Perú en el botín de los vivos y la tumba de los pobres ¿Por qué ahora debemos creer que ellos combatirán lo que cultivaron e hicieron florecer? También hay información de otro aspirante, que de convertirse en el nuevo Presidente del Perú, no respetará las libertades públicas, que instaurará modelos de países vecinos en retroceso social y económico, información que procede de su propia familia que entre otros dice: de que el país es mucho más importante que su propio consanguíneo. Además es preocupante, que este candidato lleve en su lista congresal a cadáveres políticos, sepultados por sus propias doctrinas, Marxistas, Leninistas o Maoístas ¿Qué pretenden hacer en el país? ¿Cómo saber cuál es el verdadero objetivo de este candidato y sus socios rabanitos?
El electorado peruano tiene que abrirse paso con inteligencia y mucha madurez cívica para poder identificar al presidente que más le convenga al Perú; desechando excesivas promesas, propaganda, visitas electoreras y anteponiendo, la honestidad, sinceridad e inexcusable vocación de servicio del candidato, así como el conocimiento de su plan de gobierno. La tarea será ardua, pero no imposible. Hay por delante un gran trabajo de difusión y sensibilización popular para desalojar de la política a personajes nefastos que no son aptos para representarnos, porque no hay mal que dure cien años, ni cuerpo que lo resista. En esa tarea la juventud, esta obligada a construir en futuro una sociedad más justa, sin tener que desaparecer a los pobres para desaparecer la pobreza.
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