sábado, 20 de febrero de 2010

CORRUPCION, PROBLEMA NACIONAL

La corrupción es el uso de la posición y el poder públicos para fines ilegítimos, inmorales, ilegales o diferentes a lo formalmente establecido. Corromper significa dañar, alterar, echar a perder, viciar, pervertir. En el país la corrupción echa raíces profundas en los diversos niveles de gobierno: Nacional, regional, provincial, local. Cada actividad estatal crea una oportunidad de corruptela. Al elegir o nombrar a una autoridad o funcionario dándole el derecho de decidir sobre recursos económicos y materiales que no son de él, todos quisiéramos que esos recursos los usara en provecho de todos, pero lo cierto es que muchos lo usan en provecho propio. Si se redujera el estado esas oportunidades mermarían. La corrupción se ha convertido en el principal problema del Perú. Ha invadido al estado, convirtiéndolo en un estado perverso manejado por una clase política también perversa cuyo objetivo es llenarse los bolsillos y estafar a la sociedad. Esta "clase" política no ha sabido llevar a la sociedad al lugar que merece. Parece que se hubieran convertido en parásitos que viven y manipulan a nuestra sociedad. Ya en el poder, nunca cumplen sus promesas, imponen leyes y demás normas para defender sus conveniencias. ¿Cuántos “topos” tiene en el Congreso, en la Corte Suprema de Justicia, en el Consejo Nacional de la magistratura, por ejemplo la Universidad Alas Peruanas? O ya olvidaron. Las consecuencias de la corrupción generalizada en la administración pública, las pagan las mayorías de nuestros pueblos, los de siempre, los más pobres, los olvidados, y es claro que nadie contribuye a beneficiarlos, a mejorar sus niveles de vida. El apogeo económico del Perú, muy publicitado ¿ha beneficiado a los marginados? ¿Cómo les ha cambiado la vida? ¿Están mejor que antes o se ha convertido en mendigos?... la violencia estructural se refleja en una descomposición social, en la que, la violencia es el común denominador junto a los fenómenos de la corrupción, narcotráfico y terrorismo Falta cultura democrática, reflejada en la participación ciudadana. Es muy urgente e indispensable apoyar la participación de la sociedad en los momentos y en los temas de importancia trascendental para el país, mediante la institucionalización del diálogo nacional como mecanismo permanente de participación ciudadana y fortalecer las organizaciones actuales y/o espacios de consulta y apertura con la sociedad civil. Combatir la corrupción, pasa entre otros, por 1. Que la solución al flagelo de la corrupción no es inmediata. Esto es, que cualquier solución realista tratará de disminuir los niveles y no de eliminar el fenómeno y, además, que es un proceso lento, gradual y no un acto ni unilateral ni fulminante. 2. Que debe ser una solución integral, esto es, que el flagelo debe ser atacado por todos sus frentes al unísono. Se necesitan soluciones sistémicas. 3. Que el énfasis principal debe estar en la prevención principalmente, aunque sin menoscabo por la importancia de la penalización del delito. 4. Las soluciones al alcance de la mano implican que a mayor corrupción hay que replicar con más democracia, es decir, que todos debemos ser libres e iguales incluso para el acceso a la información. 5. Que la sociedad civil tome un papel fundamental y central en el combate a la corrupción y reclame que se le reconozca un lugar en todos los actos de gobierno. 6. Un poder judicial independiente y fuerte es esencial para el combate a la corrupción. 7. Que los sectores más afectados por el problema son los de bajos recursos, esto es, la pobreza como causa y consecuencia al mismo tiempo. La vida actual se preocupa por enseñar al hombre a ganar plata y se olvida de enseñarle cómo debe ser el como hombre, olvidando de que el hombre es la medida de todas las cosas y es él quien determina cómo son las cosas.

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