Increíble, pero cierto que 2 pueblos que son hijos de un
mismo distrito se peleen por “límites de sus respectivas comunidades
campesinas” poniendo en grave peligro la integridad física de sus integrantes y
ocasionando la destrucción de bienes materiales que pertenece a todos los
comuneros del distrito. Cuando el Presidente Augusto B. Leguía CREÓ el 22 de agosto de 1,921 el
distrito de Chaviña, mediante Ley regional Nº 478, señaló con claridad los
límites de los 2 pueblos en conflicto:”…Artículo 1º.-Créase en la provincia
de Lucanas el distrito de Chaviña, compuesta de la villa del mismo nombre,
que será la capital; y del pueblo de Para, conservando como linderos los
mismos de los pueblos que los forman…”.Por eso, considero que ESTE LÍO LINDA CON LO ABOMINABLE.
De 1921 a 2014 ha transcurrido más de 92 años de vida
pacífica y armoniosa entre la comunidad de Chaviña y la comunidad de Para. Sin
embargo habría que reconocer que el conflicto de linderos no empieza este año.
Su inicio tiene relación con la adjudicación de derechos mineros y
específicamente con los beneficios económicos que pagan las compañías mineras a
la comunidad por explotar sus tierras adjudicadas entre gallos y media noche
por malos dirigentes comunales y a espaldas del pleno de la comunidad. Lo peor que pueda pasarle a la humanidad es confundir los medios con el fin. El dinero es
un simple medio. El fin, es que la humanidad debe conservar incólume su
dignidad y nunca jamás venderlo por ningún dinero.
El conflicto surgido ha generado rumores confiables en
Chaviña. Por ejemplo se dice que un ex presidente de la Comunidad Campesina a
finales de 1,999 o principios del año 2000 desmembró parte de los linderos de
las tierras comunales de Chaviña. De ser verdad el rumor, este “caballero”
habría traicionado al pueblo que luego sin imaginar su desleal proceder lo
eligió su alcalde hasta en dos ocasiones, Por eso es IMPERATIVO Y MUY URGENTE que la comunidad de Chaviña y la comunidad de
Para, cotejen, verifiquen, comparen o contrasten sus linderos, con arreglo a lo
señalado en el Art. 1º de la Ley Regional Nº 478; u otros documentos que
posean y de una buena vez, pongan punto final a episodios tan dolorosos y
lamentables surgidos últimamente entre ambas comunidades campesinas obligadas a vivir siempre unidos y en completa armonía por ser “hermanos
de sangre” y también a despejar rumores.
Dirigentes y líderes de ambos pueblos, incluyendo a los
que residen en Lima asumimos el encargo histórico y generacional de asegurarnos
que nunca más y por ninguna razón surjan enfrentamientos entre “hermanos de
sangre”. Por consiguiente a deponer ambiciones, y anteponer lo mejor de nuestras
voluntades, convicciones y amor telúrico que sentimos por nuestra tierra natal,
para sepultar definitivamente, asuntos muy dolorosos y sensibles –linderos- de
2 comunidades hermanas que constituyen el distrito de Chaviña. Nuestra mayor gloria no está en no caer jamás, sino en levantarnos
cada vez que caigamos.
El tiempo es muy lento para los que esperan... muy rápido para los que
tienen miedo... muy largo para los que se lamentan... muy corto para los que
festejan. Pero... para los que aman... el tiempo es eternidad.
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