IMPERDONABLE

En la región Ayacucho fueron encontrados en el almacén del PRONAA, ubicado en el jirón Ciro Alegría de Jesús Nazareno en Huamanga un total de 3 mil 611 sacos de arroz a granel no aptos para consumo humano infectados con heces de roedores y hongos. A este hallazgo se suma 890 sacos del mismo producto encontrados en similar condición en otro almacén de PRONAA-Ayacucho. Por recomendación de la Dirección Ejecutiva de Salud Ambiental este producto deberá ser desechado en un relleno sanitario.

Realmente imperdonable que sucedan estas cosas en una región de extrema pobreza, donde muchas madres de familia al no poder alimentar a sus hijos, simplemente deciden envenenarlos y luego ellas ingieren el mismo veneno para suicidarse.

La pobreza no solo significa carencia de alimentos para el sustento diario, sino falta de dinero para vestirse; atender gastos de salud para toda la familia; gastos de estudios; dinero para recrearse ya sea en prácticas de deporte o cualquier otra forma; dinero para adquirir una vivienda; tener acceso a un medio de comunicación, etc. Las consecuencias de la pobreza son irreversibles, como la desnutrición que genera la tuberculosis, pero asimismo, gran cantidad de dementes y una población no apta para el trabajo físico o intelectual. En la niñez la desnutrición es tan perjudicial que dificulta el aprendizaje así como el normal desarrollo somático y psicológico. Otras consecuencias son la prostitución, la delincuencia, la violencia extrema. ¿Por qué surgió en el país algo tan destructivo como Sendero luminoso? ¿No fue por la marginación social y la pobreza generalizada?

No es justo que se tire a la basura 4,490 sacos de arroz, en una región donde el hambre oprime inclemente a la población más vulnerable como son los niños usuarios del PRONAA. ¿Qué medidas adoptará el actual gobierno para sancionar a los responsables? Culpar al anterior sería una cruel ofensa a los peruanos de a pie. El que asume un cargo, asume también los activos y pasivos. Para eso, se prevé 45 días anteriores a la toma del poder con la finalidad de transferir responsabilidades y evitar hechos como este, que contribuyen a matar de hambre a los niños, además de constituir un tiro de gracia contra la política de inclusión social. Basta de impunidad e indolencia, sobre todo, en la región natal del progenitor del actual presidente de la república.